Santo Domingo Este...La situación en los barrios del Almirante, como La Toronga, El Pela y Villaliberación, y las olonial de San Luis y otros sectores cercanos, se ha vuelto crítica. Desde hace 12 días, estos barrios han quedado sin acceso a agua potable, lo que ha generado un gran malestar entre los residentes. Esta grave falta de suministro no solo afecta la higiene y la salud de los habitantes, sino que también está poniendo en riesgo sus empleos y estabilidad económica, ya que la falta de agua impide cumplir con las exigencias mínimas de higiene laboral.
En medio de la crisis, se han reportado denuncias que aseguran que el agua que deberían recibir los barrios del Almirante está siendo desviada hacia el sector de Tamarindo, donde se estaría vendiendo a camiones cisterna. Según los vecinos, el Acueducto de Alcantarillado, encargado de suministrar el agua, parece haber olvidado a estos sectores, lo que ha agravado la situación. En lugar de garantizar el abastecimiento de agua a las comunidades más afectadas, parece que se ha optado por priorizar intereses económicos a costa del sufrimiento de los ciudadanos.
La falta de agua ha generado desesperación, especialmente porque muchos residentes dependen de este servicio para cumplir con sus labores diarias. La imposibilidad de acceder a agua para bañarse y mantener una higiene básica está afectando a cientos de personas, algunas de las cuales temen perder sus empleos debido a la falta de condiciones mínimas de salubridad.
La denuncia de que el agua está siendo desviada y vendida a camiones cisterna ha causado indignación entre los afectados. Si esto se confirma, estaríamos ante una grave irregularidad, posiblemente vinculada a prácticas corruptas de quienes gestionan el suministro de agua en la zona. Esta situación no solo refleja una deficiencia en los servicios básicos, sino también una falta de compromiso con los ciudadanos que más lo necesitan.
Este periódico, como medio independiente, se compromete a investigar a fondo este asunto y a dar a conocer la verdad. No tenemos compromisos con ningún sector oscuro, solo con la transparencia y la justicia para los habitantes de estos barrios. Es urgente que las autoridades investiguen a fondo esta situación, restablezcan el suministro de agua y sancionen a los responsables de las irregularidades que se estén cometiendo.
La crisis de agua en los barrios del Almirante es un reflejo de una gestión pública deficiente, que no puede seguir permitiendo que miles de personas carezcan de un derecho fundamental. La situación exige una acción inmediata para evitar que se repita y para garantizar que todos los habitantes de estos sectores reciban el suministro de agua que les corresponde. Es hora de que se tomen medidas concretas para resolver este problema y evitar más sufrimiento en la comunidad.