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La venta de los ingenios San Luis y Boca Chica y sus consecuencias para la economía y el empleo en la región
Por Diego Torres
La venta de los ingenios San Luis y Boca Chica, aprobada por el Congreso bajo la influencia política del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) y el Partido Revolucionario Dominicano (PRD), ha tenido un impacto negativo en las comunidades de estas zonas. Esta decisión, respaldada por el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), ha traído consigo un aumento considerable del desempleo en ambas áreas, que eran importantes fuentes de trabajo.
Boca Chica, a pesar de contar con vastas tierras y una zona turística de gran potencial, sigue sin aprovechar sus recursos de manera adecuada. En cambio, San Luis ha perdido gran parte de su tierra, ya que muchos terratenientes y militares de esa época vendieron los terrenos, lo que dejó a la comunidad sin opciones para el desarrollo agrícola o industrial. La reforma agraria reservó solo una pequeña zona ganadera, pero no se ha dado el apoyo necesario para que los campesinos puedan prosperar.
Desde la tiranía de Trujillo y los gobiernos posteriores de Joaquín Balaguer y Antonio Guzmán, los políticos que han gobernado el país se han enfocado más en enriquecerse a través de la construcción de apartamentos, la deforestación y la explotación de recursos naturales, como el oro, sin aprovechar adecuadamente el petróleo para reducir los costos de los combustibles y generar empleos.
Aunque el Banco Central de la República Dominicana señala que la economía ha tenido un crecimiento, la realidad es que la mayoría de los dominicanos está viendo cómo sus condiciones de vida empeoran. La brecha entre ricos y pobres se amplía, y los sectores más vulnerables siguen en una lucha constante por sobrevivir.
El verdadero problema es que los gobiernos dominicanos no se han enfocado en crear empresas estatales que generen empleos y beneficien a la mayoría de la población. En lugar de eso, lo que ha predominado son políticas que favorecen a unos pocos, concentrando la riqueza y dejando a muchas comunidades en el abandono. Esto ha llevado a que la economía del país, en lugar de prosperar, se estanque y la desigualdad social se haga cada vez más evidente.
