San Luis..Diógenes Ozuna, activista de derechos humanos, ha denunciado un grave abuso de poder ocurrido en la comunidad de San Luis, donde el coronel Jiménez, acompañado de una brigada de fuerzas policiales, presuntamente llevó a cabo una serie de allanamientos y demoliciones de viviendas sin justificación legal. Según el relato de Ozuna, el operativo, que inicialmente tenía como objetivo la búsqueda de drogas, resultó en la destrucción de varias casas, incluidas las de personas que no tienen relación con actividades ilícitas, como es el caso de una mujer trabajadora.
Ozuna describió uno de los incidentes más dramáticos, donde una señora humilde, que se dedica al trabajo honesto para ganarse la vida, fue testigo de cómo su vivienda fue arrasada por completo. Durante el operativo, los agentes destruyeron su puerta, ventanas, e incluso dañaron pertenencias personales de la mujer, entre ellas alimentos que intentaron llevarse. Según Ozuna, esta mujer no tiene ningún vínculo con el narcotráfico ni con actividades criminales, sino que simplemente se dedica a su trabajo diario para sobrevivir y cuidar de su familia.
Ante este abuso de poder, el activista hizo un llamado urgente al Ministerio Público y a la Policía Nacional para que intervengan y se investigue a fondo el proceder del coronel Jiménez y su brigada. En particular, Ozuna solicitó al jefe de la Policía Nacional que se tomen acciones inmediatas para esclarecer los hechos y garantizar que los responsables enfrenten las consecuencias de sus actos, asegurando que este tipo de abusos no deben quedar impunes.
El activista también subrayó que las acciones del coronel Jiménez no solo han afectado a la mujer y su familia, sino que han generado un clima de miedo y desconfianza en toda la comunidad. Los residentes de San Luis temen que el abuso de poder se repita y que otras personas inocentes sean víctimas de la misma injusticia. Además, Ozuna recordó que la mujer afectada no tiene ninguna relación con actividades criminales, como han intentado hacerle creer a la comunidad, sino que es una trabajadora honesta que lucha por el bienestar de su familia.
La denuncia de Ozuna ha generado una gran preocupación entre los defensores de los derechos humanos, quienes exigen que se garantice una investigación transparente y se tomen las medidas necesarias para evitar que situaciones similares se repitan en el futuro. La comunidad de San Luis, por su parte, espera que las autoridades actúen con responsabilidad y celeridad para asegurar que estos abusos no queden impunes, y que se haga justicia en beneficio de los afectados.
Finalmente, la denuncia también ha resaltado la necesidad de que las autoridades tomen cartas en el asunto y refuercen el respeto a los derechos fundamentales de los ciudadanos. La comunidad de San Luis pide que el abuso de poder sea investigado a fondo, con el objetivo de restaurar la confianza y garantizar la justicia para todos los afectados.