San Luis..Una pala gigantesca comenzó a demoler las casas en el barrio La Rusa de San Luis, afectando principalmente a las personas más vulnerables de la comunidad. Como ocurre a menudo en situaciones difíciles, siempre son los más pobres quienes sufren las consecuencias. Los residentes de La Rusa viven en condiciones precarias, al lado de un vertedero de basura, una zona marcada por la pobreza y la falta de recursos. Muchos de ellos no pudieron acceder a una vivienda en lugares más acomodados como Arroyo Hondo debido a sus limitaciones económicas. La única opción que encontraron fue construir pequeñas viviendas en terrenos del Estado, que en otro tiempo eran cañaverales.
Hoy, una operación conjunta de la Policía Nacional, acompañada por miembros de la Guardia de la Fuerza Aérea, llegó al barrio con el propósito de derribar las viviendas. Las autoridades comenzaron a demoler las casas, dejando a las familias en una situación de vulnerabilidad aún mayor. Es una tragedia para la gente que solo ha tenido la posibilidad de vivir en condiciones precarias, buscando sobrevivir lo mejor que pueden dentro de las limitaciones que enfrentan.
El hecho ha generado un gran malestar entre los habitantes de la comunidad, quienes piden que se busque una solución inmediata y digna para estas familias. Los residentes de La Rusa son seres humanos, dominicanos que merecen vivir con dignidad en su propia tierra. La esperanza es que las autoridades tomen en cuenta la situación de estos ciudadanos y les proporcionen una vivienda adecuada y condiciones de vida más justas. Es fundamental que se busque una alternativa para reubicar a estas personas y se les ofrezca una oportunidad real para mejorar su calidad de vida, ya que no es justo que, por su situación económica, tengan que pagar tan alto costo.