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El senador por la provincia Peravia, Wilton Guerrero, aseguró este miércoles que la historia policial del comandante de Baní, Nelson Valenzuela Madera, “es de un oficial comprometido con la delincuencia común, con el narcotráfico y con el crimen organizado”.
Indicó que la denuncia de que éste oficial le “sembró” drogas al líder opositor Juan Comprés, para inculparlo por narcotráfico, “es un asunto extremadamente delicado”.
El senador recordó que Valenzuela fue sacado de Baní y posteriormente trasladado a San Cristóbal y que se ha calentado varias veces en el desempeño de sus funciones.
“Cuando el zar de la droga Cristian Matatán, estaba reinando en San Cristóbal, él era el comandante de la plaza de San Cristóbal y en ese momento, el jefe de la Policía para ese entonces, Castro Castillo declaró que Cristian Matatán tenía una nominilla de más de un millón de pesos que les pagaba la Policía y el comandante era Valenzuela Madera”, recordó.
Guerrero aseveró que por este hecho debe dar explicaciones el director de la Policía, Nelson Peguero Paredes, quien debe decirle a la sociedad dominicana “por qué él ha designado como comandante de la Policía en Moca a un oficial de la Policía que es un delincuente reconocido”, cuestionó.
Señaló que sí se comprueba realmente que a Juan Comprés le pusieron droga, la responsabilidad más importante no es la de Valenzuela, sino de los civiles están detrás de él, por lo que exhortó a la Procuraduría General de la República a realizar una investigación exhaustiva en torno a este caso.
“No podemos volver a los tiempos de Trujillo o al tiempo de la represión balaguerista; aquí hay que respetar a los ciudadanos y los derechos democráticos de la población, porque a ningún ciudadano se le puede hacer una iniquidad como esa de ponerle droga para hacerlo caer preso de una manera arbitraria e injusta”, denunció.
Finalmente, hizo un llamado al Presidente de la República, a que tome cartas en el asunto, sí se comprueba que realmente le pusieron droga a Comprés, “porque estaríamos ante un caso horroroso, algo que no tiene precedente en la historia democrática, después de los 12 años del gobierno del doctor Balaguer”.
