Por Diego Torres
San Luis La situación que motivó la protesta tiene su origen en la contaminación provocada por una tubería averiada en la comunidad de la Casita de San Luis. Esta problemática afectaba directamente a la salud de los residentes, incluyendo a los más vulnerables, como niños y ancianos, debido al desbordamiento de aguas residuales. El reclamo de los comunitarios, encabezados por Diógenes Ozuna y apoyado por Freilin Urbaez, buscaba presionar a la CAASD para que interviniera en la reparación.
Inicialmente, el ministro de la CAASD, Felipe Suberví, no mostró disposición para resolver el problema de manera rápida, lo que motivó la organización de una protesta. Sin embargo, luego de conversaciones entre Urbaez y Ozuna, se decidió desactivar la protesta tras el compromiso del ministro de enviar una brigada. Aunque Suberví no asistió personalmente, la llegada del equipo técnico para comenzar los trabajos fue suficiente para calmar a los comunitarios, quienes confiaron en que la situación se resolvería de manera definitiva.
Este acuerdo fue clave para evitar la confrontación, demostrando que el diálogo entre las autoridades locales y los representantes comunitarios puede llevar a soluciones efectivas.