Maestras contratadas sin cobrar: Denuncian irregularidades y exigen una investigación al Ministerio de Educación
Por Diego Torres
San Luis y San Antonio de Guerra Miles de maestras contratadas por el Ministerio de Educación de la República Dominicana han denunciado públicamente que, a pesar de haber firmado contratos por tres meses, llevan entre dos y cuatro meses sin recibir el salario correspondiente. Las educadoras, que con mucho esfuerzo y sacrificio se capacitaron para desempeñar su labor en las aulas, están enfrentando una situación difícil debido al incumplimiento de pago por parte de las autoridades del Ministerio de Educación, dirigido por Ángel Hernández.
Una situación insostenible para las maestras
Las maestras afectadas han expresado su frustración, ya que no solo han dedicado tiempo y recursos a su formación profesional, sino que también enfrentan problemas familiares y económicos. Muchas de ellas son madres solteras o jefas de hogar, y sus salarios son fundamentales para la subsistencia de sus familias. La falta de pago ha creado una crisis económica en sus hogares, pues además de cumplir con su labor educativa, deben lidiar con la carga de mantener a sus hijos y cubrir otras necesidades.
“El Ministerio nos tiene trabajando, pero no nos paga. Hemos pasado mucho trabajo para llegar a ser educadoras, y ahora estamos en una situación más difícil que antes. No es justo”, comenta una de las maestras afectadas, quien prefiere permanecer en el anonimato por temor a represalias. Algunas de ellas mencionan que llevan hasta cuatro meses sin recibir su salario, lo que las ha obligado a recurrir a préstamos personales o depender de familiares para sobrevivir.
El Ministro Ángel Hernández bajo la lupa
Las denunciantes aseguran que el dinero correspondiente a sus salarios está disponible en las arcas del Ministerio de Educación, pero que, por razones desconocidas, no ha sido depositado. Exigen que el presidente Luis Abinader tome cartas en el asunto y abra una investigación para esclarecer lo que está sucediendo con los fondos destinados a los pagos de las maestras contratadas.
“Este es un dinero que está en caja y no está siendo entregado a las maestras. El ministro Ángel Hernández debe dar explicaciones claras sobre lo que está pasando con esos recursos”, afirman las maestras. Además, señalan que el Ministro ha permanecido en silencio sobre este tema, lo que aumenta la desconfianza de los educadores hacia la gestión del gobierno en este sector.
El trato hacia los maestros y maestras
A la frustración por la falta de pago se suma el maltrato verbal y la indiferencia de algunos funcionarios del Ministerio hacia los maestros. Según denuncian varios afectados, cuando intentan buscar respuestas o soluciones a sus problemas, son recibidos con evasivas o respuestas despectivas. “Cada vez que vamos a preguntar por qué no se nos paga, nos dicen que esperemos, que ya lo van a resolver, pero nunca nos dan una respuesta concreta”, relata otra de las maestras afectadas.
El sentimiento generalizado es que las autoridades no valoran el trabajo de los educadores, quienes a diario se esfuerzan por enseñar y cuidar a los niños y niñas del país, a pesar de las condiciones precarias en las que a veces deben trabajar. En lugar de apoyo, muchos de los maestros y maestras se sienten ignorados y maltratados por las autoridades.
Exigen justicia y transparencia
Las maestras y maestros afectados no solo piden que se les pague lo que les corresponde, sino que exigen una investigación seria sobre el manejo de los fondos destinados a su salario. Además, piden que se abra un proceso de rendición de cuentas para garantizar que no haya irregularidades en la asignación de los recursos del Ministerio de Educación.
A través del portal Al Instante a Diario, medio independiente sin compromisos con ningún sector, los afectados han hecho un llamado público para que la justicia actúe en favor de las maestras que se encuentran en esta difícil situación. "Si el dinero está disponible, ¿por qué no nos lo están pagando? Queremos respuestas claras y que se haga justicia", expresan los educadores en su denuncia.
Llamado a la acción: una solución urgente
La situación que enfrentan las maestras es insostenible, y su paciencia está llegando a su límite. Las educadoras piden al presidente Luis Abinader que tome medidas inmediatas para resolver este problema, y que se garantice el pago puntual de los salarios de todas las maestras contratadas. Además, insisten en la necesidad de que se investigue el manejo de los fondos por parte del Ministerio de Educación y que se sancione a los responsables de cualquier irregularidad.
La falta de pagos y el trato despectivo hacia los educadores son una señal clara de que algo no está funcionando correctamente en el Ministerio de Educación. Las maestras y maestros, que son pilares fundamentales en la formación de las futuras generaciones, merecen ser tratados con el respeto que se ganan a diario con su dedicación y esfuerzo. El tiempo para respuestas claras y soluciones rápidas se está agotando, y la presión para que se actúe se incrementa cada día.
Conclusión
La situación de las maestras contratadas es un claro ejemplo de la falta de responsabilidad y compromiso por parte del Ministerio de Educación. Mientras estas mujeres siguen cumpliendo con su deber en las aulas, exigen que se les pague por su trabajo. La situación de atraso salarial es una injusticia que debe resolverse de inmediato, y el presidente Luis Abinader tiene la oportunidad de actuar rápidamente para garantizar que los recursos públicos se manejen de manera adecuada, respetando los derechos de los profesionales de la educación.