Diógene Ozuna dice Burgo Gómez y la venta de terrenos en Santo Domingo Este desatan conflictos y represión"

Santo Domingo Este San Isidro..Dioguene Ozuna, activista de derechos humanos, ha denunciado que la policía reprimió de manera violenta a los manifestantes en el sector de La Grúa, quienes protestaban contra el posible desalojo de sus viviendas. Los residentes, temerosos de perder sus hogares, salieron a la carretera Mella a expresar su descontento, pero fueron enfrentados por agentes policiales que dispararon bombas lacrimógenas y balas de cartucho para dispersarlos. Ozuna, quien estuvo en el lugar, señaló que él mismo estuvo a punto de ser agredido mientras trataba de mediar en la situación, condenando el uso excesivo de la fuerza por parte de los agentes.

El activista Ozuna también acusó a Burgo Gómez, director de Bienes Nacionales y ministro de esa institución, de vender terrenos ubicados en zonas como Los Haitises, El Bonito y San Isidro, sin considerar las implicaciones para las comunidades que habitan esas áreas desde hace más de 100 años. Según Ozuna, una empresa extranjera habría adquirido estos terrenos, lo que pone en riesgo las viviendas de miles de familias. A raíz de esto, se especula sobre un posible desalojo violento de los residentes, ya que hay informes de que los militares, en colaboración con la policía, podrían intervenir para despejar las zonas.

Ante esta situación, Ozuna ha señalado que se está preparando una comisión para presentar un documento al Ministerio de Interior y Policía, así como a la embajada extranjera, con el fin de exigir una investigación sobre las actividades de Burgo Gómez y su relación con empresas privadas, como la de los Bisonó, que estarían involucradas en la compra masiva de terrenos en Santo Domingo Este.

Ozuna activista también expresó su preocupación por la creciente desigualdad, señalando que mientras las grandes empresas y actores políticos adquieren grandes extensiones de terreno, los ciudadanos más pobres no tienen acceso a parcelas mínimas para vivir, y enfrentan amenazas de desalojo por parte de las fuerzas del orden. Según Ozuna, esta situación refleja la violencia estructural que afecta a las clases más desfavorecidas.