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Santo Domingo RD..los últimos años, muchos han notado un cambio en la línea editorial de dos periodistas prominentes de República Dominicana: Nuria Piera y Alicia Ortega. Ambas, que en su momento se destacaron por su labor de investigación y su firme postura contra la corrupción, han dejado de lado los temas sociales y de defensa del pueblo en áreas como Santo Domingo Este y otras partes del país. Anteriormente, sus reportajes expusieron casos de abuso de poder y corrupción tanto del gobierno morado del PLD como del gobierno de Hipólito Mejía.
Sin embargo, en tiempos recientes, se ha observado que el enfoque de sus medios de comunicación ha cambiado considerablemente. En lugar de continuar investigando y exponiendo injusticias sociales, ahora muchos de sus reportajes se centran en temas más relacionados con el entretenimiento, historias de figuras públicas y hasta temas sobre cirugía estética, como las lipoesculturas, lo que ha generado cierto malestar entre sus seguidores.
Esta transformación ha llevado a que algunos sectores de la población especulen sobre el motivo detrás de este giro en sus contenidos. Se rumorea que, tras alcanzar el éxito y con una considerable estabilidad económica, las dos periodistas ya no estarían tan comprometidas con la defensa de los pobres ni con los temas de justicia social. Algunos incluso aseguran que ahora su principal interés se centra en mantener un estilo de vida lujoso, lo cual sería sustentado por los contratos y los millonarios pagos que reciben de parte del gobierno.
Por supuesto, este tipo de críticas no han sido confirmadas, pero lo que está claro es que muchos ciudadanos esperan que estas periodistas, quienes fueron voces fundamentales en la denuncia de la corrupción y los abusos de poder, retomen su papel como defensoras del pueblo. Los barrios y campos de la República Dominicana siguen enfrentando múltiples desafíos, y el pueblo sigue buscando un periodismo comprometido con la denuncia de la injusticia y la corrupción, tal como lo hicieron Piera y Ortega en sus inicios.
La cuestión es si las periodistas seguirán siendo una herramienta de cambio social o si continuarán evolucionando hacia una perspectiva más orientada a otros intereses. Solo el tiempo dirá si estas informaciones y críticas se desmentirán o si se consolidarán como una tendencia en sus trayectorias.
